Hoy hace tres años que fui chutada con una flecha roja de amor y no es metáfora.

Fue el comienzo de una relación de la cual desconozco su final.

Hoy se cumple para muchos una tradición; para mí, fue una traición.

No estaba preparada para una pasión que dure con un «siempre». Un siempre y hasta el final.

Como finalizan las relaciones atormentadas, soy la Julieta de un Romeo que se oculta tras los muros de mis venas y que recita su romance entre blancas esperas.

Pasillos laberínticos que te conducen a la cicatriz sobre mi corazón.

Escalaste un día a la cima de mi montaña y derritiendo la nieve, te lo llevaste.

No creas que me importó quedar despojada y mutilada de una cubierta que sin mí, no es más que estética.

No creas, cuando te digo que soy fría a tu amor.

Te amo, porque tú eres yo y ya no dependo de tu opinión.

Te respeto, porque me has enseñado a ser la amazonas que soy…

Y soy la que dispara las flechas devolviéndote tu amor.

Dedicado a todas las mujeres amazonas de ésta «mama»,…tierra y a mi amigo HER2+

M. D. 14 de febrero de 2017